lunes, 4 de junio de 2012

Sendero nº8: MIRADORES DE REVILLA Y TELLA

Hoy os vamos a proponer un recorrido con dos pequeños senderos, uno para la mañana y otro para la tarde. Salimos de Ascaso hacia Ainsa y cogemos la carretera de Francia. A unos 20 kilómetros,  cogemos el desvío a Tella haciendo una raqueta. En uno de los diferentes desvíos, cogemos dirección de Lamiana y Revilla. Unos metros antes de Revilla, hay una pronunciada curva a la derecha, con carteles sobre el quebrantahuesos. En el arcén podemos aparcar el coche. 

Allí comienza el sendero hacia los miradores (una media hora) desde los que hay una magnífica panorámica de las gargantas de Escuaín. Antes de iniciar el sendero, conviene que leamos bien sobre la vida del quebrantahuesos. Es muy probable que desde los miradores podamos contemplar alguno de los pocos ejemplares de esta magnífica rapaz ahora en peligro de extinción.
 
Bajo nuestros pies, a la izquierda, está el cañón, hecho por el río Yaga. En frente, al sur, se alza la cara norte del castillo Mayor, una montaña en forma de meseta inclinada muy característica de la zona y que nos separa del cañón del Besós (Añisclo)

De vuelta al coche, podemos retomar la carretera hacia arriba y llegarnos a la aldea de Revilla donde hay un pequeño centro de interpretación del quebrantahuesos. Si no,  cogemos camino de Lamiana, donde podemos comer. 

Y desde ahí, seguimos hacia Tella. Primero pasaremos junto al dólmen. Un pequeño megalito en un paraje impresionante, más o menos contemporáneo a las pirámides de Egipto

Seguimos hacia Tella, y dejamos el coche junto a la iglesia. Hay un recorrido de una hora para ver las iglesias románicas. Salimos por detras del cementerio haciendo un recorrido circular entorno a la peña del pueblo. En media hora estamos en la ermita de los santos Juan y Pablo, una de las iglesias más antiguas del románico en Aragón, consagrada en 1019. Consagrada en un lugar donde se decía que se practicaba la brujería. Cuando estés en aquel impresionante paraje, descubirás por qué.

Luego seguimos hacia las ermitas de las Vírgenes de Fajanillas y de la Peña para llegar de nuevo a Tella, donde nos espera el museo de las brujas, el mirador sobre el valle del Ara y el coche para volver a Ascaso.
 


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